El equipo colchonero es de nuevo campeón tras ganarle al mejor de Europa la temporada pasada, equipo con el que no pudo ni el mismísimo Barça. Destacar el trabajo de Quique, que se hizo cargo de un equipo al borde del descenso y lo ha encumbrado a limites impredecibles.

Un espectacular Reyes empezó a tomar los galones y desequilibrar a Chivu por la banda. En una jugada tras tropezarse y levantarse mientras Agüero se peleaba con la zaga, el sevillano recogió el balón y batió a Julio César por el palo corto. El Atlético esperó sin apuros  y noqueó a su rival a diez del final tras un centro medido de Simao que empujó a placer Agüero. La jugada la inició Raúl García, pulmón del equipo junto a Assunçao en el centro del campo. Hasta en esa línea fue superior el Atlético, un equipo que parecía mediocre el año pasado y ahora es capaz de desmontar al mejor equipo de la pasada Champions.