En L.A. Noire, Antivicio es un departamento que puede cambiar el optimismo de cualquier oficial con los ojos muy abiertos – con curtido cinismo – en un abrir y cerrar de ojos.

Los detectives del departamento de Antivicio del LAPD se meten ellos mismos en los sórdidos puntos flacos de LA, sin dejar piedra sin remover para desenmascarar a la escoria de la ciudad, drogadictos, proxenetas, camellos, prostitutas, contrabandistas, jugadores, mafiosos, matones y gánsteres. Trabajando en estos casos desafiarás tus peores y más bajas expectativas de la humanidad.

Entre los casos a los que se enfrentarán el detective Cole Phelps y su compañero en Antivicio Roy Earle, se encuentran actividades de juego ilegal, como el caso del boxeador desaparecido, y una investigación a las últimas víctimas del azote de droga que asolaba la ciudad. En “The Black Caesar”, Phelps y Earle acuden a una escena del crimen con dos yonkis muertos – músicos de jazz encontrados en un sórdido apartamento con el tubo quirúrgico aún alrededor de sus mustios y picados brazos. Lo que pudieran encontrar los detectives en la guarida de los amigos de la droga, ¿podría llevarles a la fuente de esa basura tóxica? Un raro hallazgo les lleva de lleno al peligroso mundo del tráfico de drogas…