
Microsoft ha revelado durante un evento especial en San Francisco el nuevo sistema operativo de la familia Windows que, contrario a lo que se pensaba, oficialmente no será 9 sino 10. El principal cambio estético ha sido retirar la interfaz ‘Metro’ de Windows 8 en esta nueva versión.
Los de Redmond han decidido saltarse el número 9 porque querían dar a entender que el nuevo lanzamiento será la última gran actualización de Windows. En adelante, la compañía planea realizar regulares y pequeñas actualizaciones para el código base de Windows 10, en lugar de lanzar un nuevo sistema operativo con años de diferencia.
Windows 10 mantendrá un código en común entre las múltiples plataformas donde esté presente, con una interfaz adaptada para cada dispositivo. Microsoft lanzaría una versión beta de Windows 10 la próxima semana, pero se desconoce si de manera pública o como una actualización gratuita para los usuarios de Windows 8, que era lo previamente rumorado.
El nuevo sistema operativo será una experiencia enlazada entre cada equipo. Habrá una forma para crear aplicaciones universales en el ecosistema Windows, una sola tienda para acceder a ellas, así como una manera para que sean actualizadas a través de todos los dispositivos. Por el lado de PC se reconoce una interfaz más similar a Windows 7 con toques de clásico, además del menú inicio y los paneles de Windows 8 integrados al mismo.