El efecto 3D no es apreciable si no movemos la consola, de ahí la sorpresa cuando todo cambia con un simple gesto. Da la sensación entonces de tener una cajita de recortables pegada detrás de la máquina, y que las pantallas son meros cristales transparentes que nos permiten atisbar en su interior. La mecánica de juego es interesante y el efecto 3D es sorprendente. ¿Dónde esta entonces el problema?
La baja resolución de la cámara de DSi nos obliga demasiado a menudo a realizar varios intentos para que el efecto sea el correcto. Hace falta mucha iluminación, que esta no incida directamente sobre la cámara y que nuestro rostro tenga un fuerte contraste con el fondo que tenemos detrás.